Sublime ser de la esperanza,
alma divina, todo lo dejas,
nada tu pides por eso a cambio
tu ser entero, por el entregas.
Tu, que por el, todo lo brindas,
sin siquiera sentir dolor,
solo tu entregas tantas caricias,
y su vida llenas, con tu amor.
Pendiente estás en todo momento,
tocas tu vientre por si patea,
está dentro tuyo tan adentro,
en tus entrañas, envuelto en seda.
Por nueve meses, eso tu llevas,
ansiado tiempo, tan llena de amor,
por eso mismo, solo tu siembras...
Semilla y fruto, en tu esplendor.
De noche casi, dormir no puedes,
vas a su cuna, a ver si respira,
al rato vueves a ver si te mira,
ser tan pequeño que tanto quieres.
Sublime ser, solo tu puedes,
engendras vida, das esperanza,
por eso eres, solo tu eres,
madre abnegada, con eso alcanza.
Preciado fruto el que tu entregas,
jardín del Edén, tan dentro tuyo,
nada tu pides y todo lo dejas...
En cuerpo y alma, das flor y capullo.
alma divina, todo lo dejas,
nada tu pides por eso a cambio
tu ser entero, por el entregas.
Tu, que por el, todo lo brindas,
sin siquiera sentir dolor,
solo tu entregas tantas caricias,
y su vida llenas, con tu amor.
Pendiente estás en todo momento,
tocas tu vientre por si patea,
está dentro tuyo tan adentro,
en tus entrañas, envuelto en seda.
Por nueve meses, eso tu llevas,
ansiado tiempo, tan llena de amor,
por eso mismo, solo tu siembras...
Semilla y fruto, en tu esplendor.
De noche casi, dormir no puedes,
vas a su cuna, a ver si respira,
al rato vueves a ver si te mira,
ser tan pequeño que tanto quieres.
Sublime ser, solo tu puedes,
engendras vida, das esperanza,
por eso eres, solo tu eres,
madre abnegada, con eso alcanza.
Preciado fruto el que tu entregas,
jardín del Edén, tan dentro tuyo,
nada tu pides y todo lo dejas...
En cuerpo y alma, das flor y capullo.
Autor
José Gennaro 2011
Derechos reservados
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